¿Límites? Conoce qué son y como establecerlos
Establecer límites puede resultarnos muy difícil, especialmente si estamos acostumbrados a complacer a los demás, buscamos ser aceptados y tememos estar solos. Des de pequeños aprendemos que nuestra valía está relacionada con lo que ofrecemos a los demás, sintiendo que los demás nos van a querer dependiendo de lo que les demos. Muchas veces, se nos enseña que "ser buenos" significa decir "si" a todo, complacer a los demás y hacerles sentir bien, ¿Pero qué sucede si a veces queremos decir No? ¿Nos convertimos en "malas personas"?
No, no somos malas personas ni egoístas por establecer límites, todo lo contrario. Cuando ponemos límites, estamos comunicando a las demás personas que merecemos ser respetadas, que importamos y que merecemos nuestro bienestar. Para mí, es un acto de autocuidado y amor propio. Poner límites es simplemente poder expresar nuestras necesidades, reconocer lo que queremos y lo que no queremos.
¿Por qué son tan importantes los límites?
La importancia de los límites reside en que su establecimiento nos permite ser nosotros mismos, tomar decisiones y respetar nuestros valores, sentirnos bien con nosotros mismos, nos permite comprender que somos valiosos, que apostamos por nuestro bienestar. Se trata también de una expresión de libertad, de elección.
Ahora piensa en las relaciones. Muchas veces en ellas se establece una lucha de poder en el que ambos miembros pueden, sin pretenderlo, exigir al otro aquello que les hace feliz, sin tener en cuenta la otra posición, las necesidades de la otra persona. Ello conlleva enfrentamientos y malos entendidos, puesto que al no establecerse limites "todo esta permitido" aunque haga daño a nuestro compañero/a, aconteciendo finalmente lo que llamamos un desequilibrio de poder en el que una de las partes acaba "cediendo" frente a los intereses del otro para así hacerle sentir bien, pensando que así le estará demostrando más su amor o será mejor persona.
Esta falta de límites no solo la encontramos en las relaciones de pareja, seguro que si te paras a pensar, te darás cuenta de que quizás en otros ámbitos de tu vida no existen límites y quizás te gustaría implementarlos; con las amistades, familiares, trabajo...
¿Cómo podemos establecer límites?
1. Establecer límites conlleva un buen autoconocimiento. Para poder tener claras tus fronteras debes conocer cuáles son tus valores, tus necesidades, tus miedos, tus inseguridades y también tus límites.
2. Trabajar la autoestima. Recuerda que poner límites es también una forma de autocuidado y de amor propio en la que te demuestras que te quieres y te respetas, como quieres y respetas a los demás.
3. No todo vale. Te va a resultar muy complicado establecer límites si no los defines previamente; han de ser claros, acordes con tus necesidades y valores, realistas. Por otro lado, es importante que remarques que no respetarlos tendrá consecuencias, pues si no es así estos podrán ser vulnerados en cualquier momento y no se trata de algo banal, ya está en juego tu bienestar.
4. Define tu espacio. Uno de los motivos por los que te puede resultar complejo establecer límites es porque puede aparecer el sentimiento de "culpabilidad", el sentir que estas siendo egoísta y que no estas pensando en los demás, pero no es así. Definir tu espacio te va a ayudar a trabajar en tu autonomía e independencia, alejándote de ese sentimiento de dependencia que puede darse en ocasiones con nuestro entorno.
Algunas preguntas que pueden serte útiles para establecerlos:
- ¿Por qué quiero poner este límite?
- ¿En qué me va a beneficiar este límite?
- ¿Este límite me representa?
- ¿Cuál es la mejor forma de ponerlo?
Espero que te haya resultado interesante el tema de hoy y que hayas podido comprender la importancia que tiene el establecimiento de límites saludables en nuestra vida como forma de amor propio, autoconocimiento y respeto hacía uno mismo. Todo empieza cuando nos queremos a nosotros mismos. Me despido por hoy, ¡Un saludo!